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Siento mis pechos vacíos


Es normal que los senos de la madre comiencen a sentirse menos llenos, blandos e incluso vacíos después de las primeras 6 a 12 semanas.


Muchas madres se preocupan por su producción de leche después de las primeras semanas porque notan una disminución en las cantidades bombeadas o notan que sus senos se sienten "blandos" o "huecos". Es normal que los senos se sientan en su mayor parte blandos después de las primeras semanas, aunque si ha pasado mucho tiempo sin amamantar o extraer leche, es posible que se sientan un poco llenos y pesados.


La sensación de plenitud (a veces incluso congestión) que las madres que amamantan durante las primeras semanas de amamantamiento no es de ninguna manera la norma, pero significa que los senos de la madre aún no se han adaptado a la cantidad de leche que necesita el bebé. En algún momento, por lo general alrededor de las 6-12 semanas (si una madre tiene exceso de leche, puede tardar más), su suministro de leche comenzará a ajustarse y sus senos comenzarán a sentirse menos llenos, blandos o incluso vacíos. Puede dejar de perder, puede dejar de sentirse deprimido (o sentirse menos), y si bombea puede notar que no está obteniendo tanta leche. Esto no significa que el suministro de leche haya disminuido, sino que su cuerpo se ha dado cuenta de cuánta leche se extrae de los senos y ya no produce demasiada. Este cambio puede ocurrir gradualmente o parecer bastante repentino. Muchas personas desconocen que estos cambios en los senos son normales porque muchas madres dejan de amamantar antes de tiempo y nunca ven este cambio (o malinterpretan este cambio como una señal de que el suministro de leche se ha secado y se están retirando de este cambio).


¿Por qué el cambio? Aunque la síntesis de leche ya ha pasado al control autocrino (impulsado por el vaciado de los senos) después de que llega la leche materna, la influencia hormonal adicional de las primeras semanas y meses a menudo hace que las madres tengan más leche de la que necesita su bebé. Los niveles de hormonas posparto temprano tienden a "aumentar el volumen" de la síntesis de leche para que se pueda producir leche extra si es necesario (la mayoría de las mamás pueden producir suficiente leche para mellizos o incluso trillizos). Durante los primeros meses, este nivel basal alto de prolactina, que es la norma en las primeras semanas, disminuye gradualmente hasta el nivel basal más bajo, que es la norma para la siguiente lactancia. Después de este punto, puede ser más fácil para el cuerpo de la madre regular la producción de leche de acuerdo con las necesidades del bebé.

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